Una de mis
principales motivaciones es que provengo de una familia campesina que se
dedicaban al comercio y la agricultura.
El hecho de que mis padres tuvieran un
negocio familiar, ubicado en una comunidad rural, siendo esta una de las principales fuentes de
ingresos que garantizaban el sustento de muchas familias, fue una de los
principales estímulos que he tenido.
Debido a las secuelas de la guerra de los 80, nos tocó emigrar a la
ciudad, abandonarlo todo y partir de cero. Sin embargo este no fue un ningún
obstáculo para que mi madre emprendiera de nuevo y continuar ejerciendo su
trabajo de manera digna. Conocer, entender de cerca las necesidades que se
presentan en este sector, como la falta a la accesibilidad al crédito, entre
otras limitantes y sobre todo el dinamismo, el entusiasmo que se desenvuelven, a pesar de las barreras que
se presentan, me permitió tener una conexión inmediata e identificarme con el
grupo meta.
Las mujeres aportamos
de manera significativa al desarrollo de nuestros países. Nuestra contribución va mas allá de las frías cifras que se
contribuyen al PIB, independientemente de la ocupación que tengamos, ya que nos
miramos inmersas las distintas tareas del diario vivir, iniciando por los valores
que inculcamos a las nuevas generaciones.
Olga Siles
Coordinadora
Reclutamiento ANDARES, Nicaragua
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