Como una joven
profesional, nunca pensé que el trabajo con comunidades podría ser parte de mi
desarrollo como tal, ya que consideraba que mis potencialidades estaban dadas
únicamente para temas más fríos y tangibles como la medición de tiempos y
movimientos en una línea de producción industrial. Pero las oportunidades que se me fueron
presentando, siempre tuvieron que ver con microempresarios, de los cuales he
aprendido a lo largo de la vida que solo hay que tener un ingrediente dentro de
nosotras mismas para cumplir nuestros sueños y ¡es PASIÓN por lo que hacemos!
Eso es precisamente
lo que hoy siento, un gran apasionamiento por aportar y ser parte del
desarrollo de las capacidades y competencias de nuestras comunidades
colombianas; pero principalmente destacando que la participación mayoritaria de
la mujer en todos estos procesos, permite garantizar el afianzamiento de
valores, la formación adecuada y coherente hacia sus familias y la seguridad de
dejar huella en las nuevas generaciones de mujeres en las que debemos enfatizar
que, más allá de una buena y exitosa idea de negocio que le procurará bienestar
económico a ella y a los suyos, debe prevalecer el respeto de la dignidad
humana, el ejercicio de su libertad y por lo tanto la autonomía para conducir
sus destinos de manera ética y responsable.
Claudia Jiménez
Coordinadora de Reclutamiento ANDARES, Colombia.
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